11 marzo 2010
Comunicado de La Embajada de Israel en España.
En relación con el mitin anti-israelí convocado en Barcelona bajo la denominación de "Tribunal Rusell para Palestina", la embajada de Israel quiere comentar los siguientes puntos:
-Sin credibilidad ni peso moral. El así autodenominado tribunal está constituido exclusivamente por personas con una larga trayectoria anti-israelí, al igual que la nómina de personas e instituciones que lo apadrinan. No hay una sola voz independiente, es simplemente una tribuna de linchamiento que escenificará la lectura de una sentencia condenatoria de Israel, cuyo guión estaba decidido desde el mismo momento de su convocatoria. Una sentencia de condena tan previsible como la que dictaría un jurado compuesto exclusivamente por miembros del Ku Klux Klan en un proceso contra un hombre de color.
-Un tribunal singular en el que todos los miembros del jurado han sido elegidos precisamente por sus previas posiciones anti-israelíes (incluso algún antisemita), al igual que la totalidad de los intervinientes; un juicio en el que el acusado no sólo no tiene quien le defienda, sino que tan siquiera estará presente para ser interrogado. Incluso en los tribunales de la inquisición española, en los juicios estalinistas o en los del Irán de los ayatolas podríamos encontrar más elementos de justicia y equidad.
-De la misma manera que los antisemitas de nuestros días utilizan la frase "tengo un amigo judío", los organizadores de este acto hacen alarde de los israelíes y judíos que apoyan su política de odio a Israel siendo utilizados como una hoja de parra para tratar de ocultar su antisemitismo. Aunque pocos son los israelíes y los judíos que apoyan este tipo de foros extremistas, esos pocos aparecen una y otra vez, no por su importancia, conocimiento o relevancia, sino por que sus puntos de vista resultan convenientes a los organizadores. En este foro no se escuchará ni una sola voz favorable a Israel. Las posturas de los israelíes y judíos dedicados a la deslegitimación de Israel no tiene más valor que las de los ingleses o estadounidenses que apoyaron al nazismo durante la Segunda Guerra Mundial.
_Que nadie se deje engañar. Eventos como este jamás buscan la verdad, ni la justicia, ni contribuir a la paz entre israelíes o palestinos, ni tan siquiera la defensa de la causa palestina. No tienen más objetivo que convertirse en cauce de la obsesión anti-israelí de personas, instituciones y oenegés que han hecho de la demonización de Israel instrumento de propaganda.
-Sin credibilidad ni peso moral. El así autodenominado tribunal está constituido exclusivamente por personas con una larga trayectoria anti-israelí, al igual que la nómina de personas e instituciones que lo apadrinan. No hay una sola voz independiente, es simplemente una tribuna de linchamiento que escenificará la lectura de una sentencia condenatoria de Israel, cuyo guión estaba decidido desde el mismo momento de su convocatoria. Una sentencia de condena tan previsible como la que dictaría un jurado compuesto exclusivamente por miembros del Ku Klux Klan en un proceso contra un hombre de color.
-Un tribunal singular en el que todos los miembros del jurado han sido elegidos precisamente por sus previas posiciones anti-israelíes (incluso algún antisemita), al igual que la totalidad de los intervinientes; un juicio en el que el acusado no sólo no tiene quien le defienda, sino que tan siquiera estará presente para ser interrogado. Incluso en los tribunales de la inquisición española, en los juicios estalinistas o en los del Irán de los ayatolas podríamos encontrar más elementos de justicia y equidad.
-De la misma manera que los antisemitas de nuestros días utilizan la frase "tengo un amigo judío", los organizadores de este acto hacen alarde de los israelíes y judíos que apoyan su política de odio a Israel siendo utilizados como una hoja de parra para tratar de ocultar su antisemitismo. Aunque pocos son los israelíes y los judíos que apoyan este tipo de foros extremistas, esos pocos aparecen una y otra vez, no por su importancia, conocimiento o relevancia, sino por que sus puntos de vista resultan convenientes a los organizadores. En este foro no se escuchará ni una sola voz favorable a Israel. Las posturas de los israelíes y judíos dedicados a la deslegitimación de Israel no tiene más valor que las de los ingleses o estadounidenses que apoyaron al nazismo durante la Segunda Guerra Mundial.
_Que nadie se deje engañar. Eventos como este jamás buscan la verdad, ni la justicia, ni contribuir a la paz entre israelíes o palestinos, ni tan siquiera la defensa de la causa palestina. No tienen más objetivo que convertirse en cauce de la obsesión anti-israelí de personas, instituciones y oenegés que han hecho de la demonización de Israel instrumento de propaganda.