07 febrero 2008
Gazastán recibe a 2.000 terroristas extranjeros.
Cerca de 2.000 terroristas provenientes de distintos países árabes entraron ayer en Gazastán, tras derribar el muro del paso fronterizo de Rafah, con la intención de unirse a los terroristas palestinos en su lucha criminal contra Israel, según fuentes palestinas, citadas por la agencia palestina de noticias Maan.
Para evitar que Gazastán se convierta en otros Iraq y Afganistán, Israel debería cerrar a cal y canto la frontera Gaza-Egipto, que dejó en manos de los palestinos bajo suprevisión de la ineficiente ONU, seguido de una operación antiterrorista de gran envergadura para eliminar a todos los criminales extranjeros que han llegado aprovechando el derribo de la frontera.
Fuentes cercanas a Hamás aseguraron que muchos de los hombres, en su mayoría jóvenes egipcios, se ofrecieron a unirse a la resistencia. Además, añadieron que Hamas expresó su aprecio por la solidaridad demostrada en este acto. Aun así, las facciones de la resistencia palestina no están realmente interesadas en combatientes extranjeros, según Maan.
De todas formas, el fenómeno de fuerzas extranjeras que se unen a la resistencia no es nuevo, varios líderes árabes, incluso, se unieron en el pasado a la causa palestina, como Sheikh Izziddin Al-Qassam, un sirio que luchó contra los británicos en la década de los años 30.
Para evitar que Gazastán se convierta en otros Iraq y Afganistán, Israel debería cerrar a cal y canto la frontera Gaza-Egipto, que dejó en manos de los palestinos bajo suprevisión de la ineficiente ONU, seguido de una operación antiterrorista de gran envergadura para eliminar a todos los criminales extranjeros que han llegado aprovechando el derribo de la frontera.