17 enero 2008
Lecciones contra la Shoah.
Una muestra sobre el Holocausto nazi recorrerá hasta final de curso una veintena de institutos asturianos para recordar un pedazo de historia que requiere de más espacio en los libros de texto.
El Holocausto no ocupa suficiente espacio en los libros de texto. Seis millones de muertos en la Europa del siglo XX merecen que los escolares sepan los cómos y los inexplicables porqués del genocidio. Eso piensa el Grupo Eleuterio Quintanilla, del que forman parte unos catorce docentes asturianos, y que en los últimos dos años ha estudiado a fondo el material didáctico que existe al respecto en España para concluir que «la información que se da del Holocausto es más bien escasa, los alumnos conocen algunos conceptos históricos que se tratan en el contexto de la segunda guerra mundial pero no con la amplitud que requieren y sin un posicionamiento ético y moral», en palabras de José Ángel Álvarez Cienfuegos, uno de los componentes de este grupo que elaboró el libro 'Pensad que esto ha sucedido, guía de recursos para el estudio del Holocausto'. La obra ha sido ya distribuida por los institutos de toda Asturias, dirigida a los profesores de Secundaria, y es, a decir, de sus autores, el más completo trabajo de estas características abordado jamás en España.
Se subdivide en apartados un viaje que empieza por el principio: "Los judíos en la sociedad alemana de entreguerras" es el primer capítulo, en el que se presentan unos felices años treinta en los que más de 500.000 judíos vivían en Alemania y 400.000 en Austria, completamente integrados en la sociedad. Luego llegó Hitler al poder, el nazismo, el antisemitismo y la persecución. Las imágenes del Führer sirven para ilustrar la llegada de leyes que significaron la muerte cívica y económica de un colectivo que acabaría confinado en guetos.
Se ofrecen en los paneles un sinfín de testimonios de las víctimas, las grandes olvidadas a la hora de contar la historia a decir de José Ángel Álvarez Cienfuegos, que asegura que en los libros de texto han tenido más espacio los verdugos. No faltan las historias de los guetos, el paso previo a "la solución final al problema judío", que pasó por las deportaciones, los campos de exterminio... Y por Auschwitz, el campo de concentración al que se dedican varios paneles que incluyen la cronología del horror, imágenes de los presos de la barbarie, testimonios, y se detalla incluso el funcionamiento de las cámaras de gas. Tiene el campo polaco un especial protagonismo en una muestra que no se olvida de las otras víctimas, los no judíos, perseguidos por ser comunistas, homosexuales, gitanos y testigos de Jehová, que también sufrieron el drama, entre ellos unos nueve mil republicanos españoles que fueron internados en campos de concentración.
# posted by Daniel @ 5:40 p. m. 
