26 marzo 2007

 

Negación del Holocausto y Libertad de Expresión.

Víctor Harel, Embajador de Israel en España cree en la necesidad de convertir en delito la negación del Holocausto para impedir nuevos brotes de antisemitismo y para ello aporta varios argumentos.

Dos argumentos fundamentales, favoreciendo la imposición del delito, podrían ser esgrimidos en el presente debate europeo:

I. Negacionistas de la catadura moral de Roger Garaudy y su Fundación en Córdoba aducen que el Holocausto nunca existió, o que "seis millones es una exagerada barbaridad", o que toda la "historia" del Holocausto no es más que "invención judía para chantajear al mundo cristiano", y otra sarta de falsedades más.

La libertad de expresión que permitiría el negacionismo puede acarrear actos criminales que dañarían los derechos adquiridos de otros, de las comunidades judías, perjudicando sus derechos inalienables a vivir sin temor a actos antisemitas.

La sentencia del Tribunal Constitucional del 11 de noviembre de 1991 (caso Violeta Friedman) estipula: "Ni el ejercicio de la libertad ideológica, ni la de expresión, pueden amparar expresiones destinadas a generar sentimientos de hostilidad contra determinados grupos étnicos, pues en un Estado como el español los integrantes de aquellas colectividades tienen derecho a convivir pacíficamente y a ser plenamente respetados por los demás miembros de la comunidad social".

II. La singularidad de la Shoá, ese crimen contra la Humanidad, no es comparable a ningún otro genocidio. Fue una combinación única -y abominable- de pretextos raciales, religiosos, económicos, sociales, políticos y pseudo-científicos. El nazismo, engendrado en el corazón de la Europa de las Luces y obsesionado con su voluntad de exterminar a un pueblo, ha sido ampliamente tratado y no hay necesidad de extenderse en ello. Seis millones de argumentos hablan por sí solos, aun cuando guarden un silencio sepulcral.

Artículo completo.

Comments:
Bueno, ese es un tema más complicado. En la Argentina tenemos muchísimas leyes que condenan todo tipo de racismo, xenofobia y antisemitismo, pero no tenemos una ley que prohiba expresamente la negación del Holocausto. Lo que está prohibido en mi país (como en todos los países democráticos y civilizados) es la apología del delito y/o racismo, por ejemplo, si algún argentino dice publicamente: "está bien que hayan matado seis millones de judíos", ese tipo va a la cárcel o tiene que pagar una multa muy elevada (o debería). Lo mismo pasaría si alguien dice: "toda la historia del Holocausto no es más que invención judía para chantajear al mundo cristiano"... el que dice eso (además de recibir miles de condenas) iría a la cárcel por unos cuantos años, ya que está ejerciendo la apología del delito porque está fomentando el racismo contra los judíos. Pero en la Argentina no tenemos una ley que prohiba a alguien decir: "para mi el Holocausto no existió", ya que (según la ley antidiscriminatoria argentina) el tipo que dice eso no estaría promoviendo el antisemitismo, sino negando un hecho histórico (en teoría, esas son las desventajas de la "libertad de expresión").

Ahora voy a decir mi opinión personal:

Yo considero que si un tipo dice "el Holocausto no existió" TAMBIÉN está ejerciendo la judeofobia y promoviendo la apología del delito, de la misma manera que aquél que dice: "hay que matar a todos los judíos". Por una simple razón: está negando un genocidio perpetrado contra un pueblo por el peor régimen totalitario que constituyó la forma más cruel del racismo xenófobo, por lo tanto, debería estar prohibido por la ley antidiscriminatoria argentina. Lo mismo debería pasar, por ejemplo, con la negación del genocidio armenio o la negación de los 30.000 desaparecidos argentinos durante la última dictadura militar. Considero que el negacionismo constituye un crimen racista y una apología del delito, y que debería ser penado severamente por la ley en la Argentina, en España y en todos los países del mundo. De todas maneras, les cuento a los españoles que en la Argentina el negacionismo está totalmente condenado y nadie (a menos que sea un estúpido o un sin-verguenza) se atrevería a negar el Holocausto, pero de todas maneras sería bueno tener una ley como en Alemania o Austria que prohibe el negacionismo para recordarle a los nazis "skinhead" que la libertad de expresión no protege a los enemigos de la democracia y la tolerancia. En las librerías de Buenos Aires se pueden encontrar textos anti-israelíes e incluso anti-judíos (disfrazados de algo como "antisionismo"), pero lo que nunca se puede encontrar es un libro negacionista, para conseguir un libro que niegue el Holocausto hay que buscar a Biondini y pedirle que escriba un libro.

Libertad de expresión: SI
Apología del delito: NO

Que la democracia no sea sinónimo de impunidad.
 
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