04 octubre 2007

 

La gran mentira.

Jeff Jacoby afirma que las políticas de Estados Unidos son pro-Israel porque el pueblo estadounidense es pro-Israel, no por las presuntas maquinaciones de un inexistente lobby sionista, sino porque ve en Israel una democracia liberal y un aliado asediado pero leal.

Cuando John Mearsheimer y Stephen Walt se embarcaron en The Israel Lobby and US Foreign Policy, un libro de 484 páginas que asegura que una enorme maquinaria proisraelí controla los asuntos de Estados Unidos en Oriente Medio y aplasta a aquellos que se interponen, esperaban ser condenados como antisemitas.

"La acusación de antisemitismo", escriben los dos académicos en su libro (como ya hicieran en su famoso ensayo de 2006 sobre la materia) es una de las "armas más poderosas" del arsenal del lobby de Israel. "Cualquiera que critique las acciones de Israel o diga que los grupos proisraelíes tienen una influencia significativa sobre la política estadounidense en Oriente Medio tiene bastantes posibilidades de salir etiquetado de antisemita. De hecho, cualquiera que diga que existe un lobby de Israel corre el riesgo de ser acusado de antisemitismo."

Lo que es indiscutible es que Mearsheimer y Walt no han sido censurados en ningún sentido. Sus opiniones han sido ampliamente discutidas. De hecho, un importante editor les invitó a plasmar esas opiniones en un libro. Su afirmación de que cualquiera crítico con Israel y sus partidarios es despedazado despiadadamente es simplemente mentira. Desde Jimmy Carter hasta Noam Chomsky pasando por Pat Buchanan, desde los medios a la universidad pasando por la blogosfera, desde los pasillos de la ONU a los "realistas" del Departamento de Estado, los detractores de Israel forman una ruidosa legión, con frecuencia de manera bastante lucrativa.

De modo que, ¿por qué la gran mentira sobre el "Gran Censor"? Quizá para ocultar el hecho de que la hostilidad hacia Israel simplemente no es un sabor que le guste a la mayoría de los norteamericanos. Sí, el mensaje Mearsheimer-Walt vende libros y colecciona conferencias. Pero en el mercado de las ideas, su punto de vista es débil y poco convincente. Las políticas de Estados Unidos son pro-Israel porque el pueblo estadounidense es pro-Israel; y no lo es por las maquinaciones de un lobby sionista, sino porque ve en Israel una democracia liberal y un aliado asediado pero leal en la guerra contra el islam radical.

Comments: Publicar un comentario



<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't yours?